Mércores, 13 de decembro de 2017 Do Artesanato, turismo rural, senderismo, rutas
Salimos de Santiago – la ciudad de las cinco estrellas que grabó en piedra Fonseca III– en la búsqueda del fin del mundo. Recorreremos el paralelo 42, como hicieron pueblos enteros andándolo de levante a poniente durante miles de años. Como ellos, de día seguiremos la dirección del Sol. De noche, la luz de millones de estrellas nos marcan el destino. Cuando la tierra acaba y no podamos dar un paso más, tendremos a nuestros pies la inmensidad del océano. Al lado de ese mar, de esa cuna de estrellas redescubriremos quienes somos, nos sentiremos renovados y nuestra mirada se hará más amplia.
En el finisterrae no tendremos la sensación de que algo termina. Ahora empieza todo de nuevo porque algo ha cambiado, porque nosotros cambiamos y tenemos más fortaleza, confianza y seguridad. El mundo se ha alargado y nosotros con é. Y entonces es cuando decidimos buscar el sur.
Con el sol poniéndose a nuestra derecha transitaremos una de las costas menos conocidas y más hermosas. Abriremos paso a paso un nuevo camino por la senda que lleva de la cuna de las estrellas a la Ría de Muros y Noia, también llamada la Ría da Estrela.
Volvemos a Compostela por el Camino Inglés donde la aventura finaliza y nos aguardan de nuevo las cinco estrellas en los escudos. Esas estrellas que ya te acompañarán siempre.